lunes, 1 de febrero de 2016

Tarjetas Multiherramienta: Sencillas, prácticas y compactas.

Una tarjeta multiusos estándar.

¿QUÉ SON?

Las tarjetas multiusos o multiherramienta son aquellas laminas hechas generalmente de metal stainless donde se concentran una serie de funciones mecánicas y técnicas que nos ayudaran a cumplir diversas tareas del día a día dados el momento adecuado.


¿PARA QUE SIRVEN?

Su principal función es tener una multiherramienta que pese poco y ocupe menos en nuestro bolsillo. Están pensadas para la comodidad del usuario que necesite una herramienta portátil para el día a día evitando cargar con las primas hermanas de esta tarjeta, más pesadas y voluminosas que, aunque cumplirían su función con mayor celeridad y eficiencia no dejaría de tener ese "handicap".


¿CUALES SON SUS FUNCIONES?

Existen una variedad cada vez más heterogénea de estas tarjetas en lo que a funciones, modelos, tamaños, materiales y como no, estética se refieren. Esta que os muestro es la que encontrareis más a menudo siendo la más "universal".

Sus funciones son:
  1. Cuchilla/Navaja.
  2. Destornillador plano.
  3. Abrelatas.
  4. Abrebotellas.
  5. Llave para tuercas de mariposa o "palometas"
  6. Regla métrica de 5cm.
  7. Hoja de sierra.
  8. Llave de tuercas medianas de 4 tamaños.
  9. Llave de tuercas pequeñas de 2 tamaños.
  10. Agujero para colgar o doblacables.
  11. Indicador de orientación para mapas.


Se podría decir que este es el ejemplo de tarjeta multiusos universal.


¿QUÉ TAMAÑO Y PESO TIENEN?

Las tarjetas multiherramientas destacan precisamente por lo manejables que son. La mayoría de ellas no son más grandes que una tarjeta de crédito, caben perfectamente en la palma de la mano. Están pensadas para llevarlas en la cartera o en cualquier bolsillo y ni os daréis cuenta de que las lleváis ya que no pesan apenas, aún estando hechas de material resistente.


Las tarjetas multiusos destacan por concentrar sus funciones en poco espacio.

Especificaciones de la tarjeta mostrada:

-Material: Stainless Steel
-Dimensiones: 8,4cm x 4cm x 0,8cm
-Peso: 59g



¿CUANTO CUESTAN Y DONDE PUEDO ENCONTRARLAS?

En cualquier tienda especializada como ferreterías, tiendas de caza y pesca, supervivencia o de útiles paramilitares. En Internet puedes encontrarla en cualquier tienda online especializada o también en Ebay o la que yo os muestro la compré en Amazon.

El precio que suelen rondar dependiendo de donde la compréis y el modelo que os guste más varía entre los 0,50€ hasta los 4€ incluso, siendo la media entre el 1€ y los 2€. La que yo compré fue en Amazon de la distribuidora Sodial y me salió por 1,49€ con envío gratuito llegando a mi casa en dos días. Venía presentada con una fundita de cuero sintético y unas instrucciones en chino xD.



EN CONCLUSIÓN

Las tarjetas multiusos o multiherramienta son una buena opción para sustituir a otras multiherramientas mas grandes para llevarlas en el día a día colgadas en el llavero o en la cartera. Como contrapunto a poner a las tarjetas es que, para aquellos usuarios exigentes que usen a diario herramientas puede que se les quede corta o no les sirva de gran ayuda. Aparentemente parecen demasiado pequeñas y frágiles, pero estas pequeñas cumplen con sus funciones dadas las limitaciones. Para el resto de los mortales, nos servirá para al menos abrir las botellas con chapa y apretar esos tornillos que nos falten :P



martes, 12 de enero de 2016

¡Jhonny Bushcraft se expande hacia nuevos horizontes!


Ya tenemos nuevos canales de contacto para aprovechar al máximo los posts que voy subiendo y la experiencia bushcraft. No olvides añadirnos en favoritos, seguirnos, suscribiros y darle a Me Gusta.

Twitter: https://twitter.com/JhonnyBushcraft

Facebook:
https://www.facebook.com/jhonnybushcraft/?ref=aymt_homepage_panel


YouTube: https://www.youtube.com/channel/UCwrBHSV6WUIkO0yTkx6dhEA

Gmail: bushcraftenespanol@gmail.com

Próximamente nuevo material será publicado, ¡estaos atentos!

¡Muchas gracias por vuestro apoyo!




lunes, 30 de noviembre de 2015

Protocolo A.C.R.



Una manera para purificar el agua es usando una botella y diferentes materiales para filtrarla.
Siendo este un blog personal me gusta dejar mi granito de arena sobre los contenidos de los que voy hablando. Mis estudios, experiencias y aplicaciones sobre el terreno me ayudan a sacar ciertas conclusiones que, a mi parecer, pienso que pueden ser útiles al lector. En este post que escribo hoy, hablaré de un protocolo de emergencia ideado por mi para esas situaciones críticas. No es nada del otro mundo, pero dada su sencillez es aplicable a cualquier situación como punto de partida.

Definición.

Aunque la palabra "protocolo" tiene un significado de norma social o de buena conducta, he visto acertado aplicarlo a mi "conceptualización personal" para definir tres pautas que nos ayudarán a priorizar nuestras necesidades básicas en una situación de emergencia.

El "Protocolo A.C.R." es la priorización de tres necesidades básicas que tenemos los seres humanos. Las siglas A.C.R. significan: Agua, Comida y Refugio.

Sea cual sea la situación de supervivencia en la que nos veamos inmersos, estas tres necesidades son las prioridades invariables que debemos controlar para garantizar nuestra seguridad y bienestar. El orden en el que están planteadas no es arbitrario, es más que evidente que el recurso más preciado en cualquier entorno es nuestro liquido elemental. El alimento entra en segundo plano cuando tenemos localizada y asegurada el agua, y una vez que tenemos nuestra fuente de energía controlada, debemos buscar un refugio que nos proteja a nosotros y a nuestros bienes en aquellos momentos de vulnerabilidad, como puede ser la meteorología, los momentos de descanso o las amenazas que nos acechen en la intemperie.

Hay que tener presente también que, aunque el orden de estos factores es importante frente a su prioridad, también es susceptible de cambio si nuestra situación pasa por un nivel crítico donde el alimento o el refugio son prioritarios. Para ello tener siempre presente la Regla Universal del 3.

Manantial del Molino. Grazalema, Cádiz.


El agua es vida.

Algunos datos sobre el agua:
  • Es el recurso más valioso del que disponemos. 
  • Aunque las tres cuartas partes del planeta es agua, solamente hay un 3% de agua dulce en ella y de ese porcentaje, el 2% está congelada. Al resto que nos queda hay que quitarle el porcentaje de agua dulce no potable o contaminada.
  • Más de la mitad de nuestro peso es gracias al agua que hay en nuestro interior y estamos prácticamente hechos de agua en un 70%.
  •  El ser humano no debería de pasar más de tres días sin beber agua y podríamos estar hasta cinco días sin probar ni gota antes de morir por deshidratación. 
  • Un adulto medio necesita beber unos 2´5L diarios.
  • Cuando los niveles de agua caen en nuestro organismo, sufrimos deshidratación. Los síntomas son: Sed intensa, náuseas, mareos, hambre, dolores musculares y cefaleas, fatiga, movimientos lentos, falta de reflejos, respiración por la boca. En una deshidratación grave encontramos: Ojos hundidos, letargo, pulso acelerado, carencia de orina u orina muy oscura, espasmos musculares, piel arrugada, labios secos, hormigueos y delirios.
  • Los golpes de calor y los calambres musculares suelen estar relacionados con falta de hidratación.
Como podéis observar, estos datos representan la importancia vital del agua en nuestra existencia y de ahí que esté como el primer bien en el ranking. En futuros posts ampliaremos la información sobre como transportar el agua, como conservarla, filtrarla o depurarla en caso de conseguirla de fuentes las cuales no sabemos su origen, etc.

Para concluir este apartado, unos consejos:
  1. Llevar siempre una botella de al menos litro y medio con vosotros vayáis donde vayáis.
  2. Comed mucha fruta y verdura, ya que son ricas en agua y minerales.
  3. Vigila el color de tu orina, cuanto más clara, más hidratado estarás.

Los frutos secos son un alimento muy nutritivo. Intenta saber que frutos maduran en cada época del año para optimizar tus búsquedas.

Alimentos, la gasolina del cuerpo.

Una vez tengamos el agua controlada es hora de buscar comida. Lo primero que debemos hacer es un recuento de los víveres que tengamos y dividirlos en tantas partes como podamos, el hambre se combate mejor con pequeñas comidas al día que comiendo solo una vez mucha comida. Lo ideal sería comer cada 3 o 4 horas, reservando las comidas más fuertes, nutritivas o con más alto nivel calórico para el desayuno e ir reduciendo la cantidad a medida que avanza el día. Un ejemplo de ello sería el siguiente:
  • Desayuno: La comida más importante del día. Aquí tenemos que consumir la mayoría de carbohidratos, proteínas, grasas y vitaminas que podamos, siempre pensando en no quedarnos sin reserva para el resto del día. En el desayuno es reconfortante comer caliente, o al menos con bebida caliente. 
  • Aperitivo: Pasadas 3 o 4 horas, puede que volvamos a tener hambre. Como en ese tiempo estaríamos ocupados en actividades de construcción, recolección, reparación, pesca o caza, etc; sería correcto tener a mano siempre un buen puñado de frutos secos que son fáciles de transportar, o localizar árboles o plantas frutales que nos aporten la glucosa necesaria. Recuerda que almacenar fruta fresca puede estropear la misma, para ello es mejor tener localizado la planta frutal en sí y recolectar solo lo que vayamos a consumir.
  • Almuerzo: A la hora de almorzar, es ideal preparar y comer lo que hayamos cazado o pescado por la mañana. Así evitamos que se eche a perder y aprovechamos mejor los nutrientes. También viene bien para nuestra psique acompañar la comida que tengamos con un "postre". Reservar los alimentos dulces para el final aparte de satisfactorio nos da sensación de saciedad. Si no hemos tenido suerte en la jornada de caza o pesca, piensa que la comida caliente reconforta a esta hora. Estudia las posibilidades de cocción que te ofrecen tus víveres.
  • Merienda: Podemos consumir lo mismo que en el aperitivo, escogiendo siempre que se pueda alimentos altos en glucosa como miel o fruta madura. Hay quien gusta de acompañar esto con una bebida caliente como infusiones de raíces y hierbas que encontremos.
  • Cena: La cena debería ser la comida menos copiosa y con menor cantidad, escoger alimentos de fácil digestión y si estamos en climas húmedos o fríos, preparad caldos y cenas calientes que nos ayuden a dormir. Las sobras del almuerzo es una buena opción o si hemos podido cazar o pescar algo a la noche, preparar la mitad para la cena y el resto para el día siguiente. Las setas, hongos, raíces y tubérculos que encontremos son buenos alimentos para hacer caldos con ellos, pero vigila que no sean venenosos.
Si nos encontramos con reservas en nuestra mochila debemos contemplar que alimentos caducarían antes. Esto es muy importante ya que si poseemos comida en conserva debemos guardar esta para casos extremos donde no tengamos nada para comer. En una situación de supervivencia ocurre que no encontramos nada que comer ese día, ni recolectado, ni pescado, ni cazado. Esto se acentuará sobre todo dependiendo de la época del año y el lugar donde nos hallemos. Las reservas que si tienen un periodo de caducidad más reducido si debemos considerarlas como primeras para consumir, incluso si podemos cazar o recolectar; así aprovechamos los nutrientes y amortiguamos la psique en la situación.

Ejemplo de chamizos improvisados. Dos refugios de fácil construcción que nos llevará pocas horas con materiales que el bosque nos proporcionará.

 El refugio, tu mejor aliado.
Hemos saciado nuestra sed y encontrado agua potable. Hemos contado nuestros víveres y localizado fauna y flora para abastecernos. Pero se hace noche, cada vez hay menos luz. La temperatura comienza a bajar y estás solo en mitad de la naturaleza. Pronto no verás nada y necesitas descansar, calentarte y guardar tus pertenencias. Es ahora cuando necesitas un buen refugio.

La urgencia de buscar agua y comida hace que no nos quedemos en un sitio fijo hasta que no lo hayamos controlado. Si la búsqueda es infructuosa y contamos con energía y posibilidades para seguir más tarde, conviene hacer nuestra "base" como punto de control. Esto nos ayudará a descansar, a trazar una estrategia y sobre todo a marcar nuestro territorio ante cualquier amenaza.

Un refugio suele ser algo provisional, sobre todo cuando salimos al monte a practicar bushcraft. Pero si la cosa da para largo, es posible que tengamos que invertir trabajo y tiempo en hacer nuestra "casa de campo" particular con los materiales que encontremos. En este post, explicaremos detalladamente los tipos y las diferentes formas que existen de improvisar refugios para unas horas hasta auténticas fortalezas que nos servirán durante semanas.

Los refugios como hemos dicho, van de pequeños chamizos donde solo cabe una persona tumbada a verdaderas construcciones de troncos, piedra e incluso adobe. Es importante que usemos en la medida de lo posible materiales 100% naturales y biodegradables, ya que así nos mimetizaremos mejor con el medio, el impacto ecológico sería mínimo y podríamos abandonarlo en cualquier momento sin tener que desarmarlo ya que el tiempo hará ese trabajo y mientras tanto lo podríamos necesitar en el futuro o servir a otra persona.

En los siguientes vídeos podemos observar la construcción de dos refugios hechos sin materiales ninguno, solo con lo que nos ofrece el bosque. Hay que decir que el constructor de ambos solo usa técnicas de puro bushcraft o "paleoconstrucción" de una manera formidable, invirtiendo mucho tiempo, trabajo y sobre todo paciencia.


Este refugio es el idea para una convivencia en el bosque de poca duración, hasta que lo abandonemos.


Este otro vídeo nos muestra una construcción para una convivencia de meses en el medio.

Por último unos tips para saber que debe tener un refugio:
  1. Un buen refugio debe tener como mínimo un techo para protegerte de la meteorología (lluvia, viento, hojas, etc).
  2. Un buen refugio debe tener al menos una pared para aislarnos de la intemperie.
  3. Un buen refugio debe tener sitio para una hoguera segura.
  4. Un buen refugio debe estar construido con materiales del bosque, o al menos, aprovechando lo que el terreno ofrece (cuevas, grutas, paredes, madrigueras, etc)
  5. Un buen refugio debe albergar al menos a una persona adulta acostada y que tenga una altura donde al menos se pueda ir de cuclillas.

Otros factores a tener muy en cuenta.

Como cité al principio, aunque el protocolo esta para darle importancia a lo primero que necesitamos, también existen una serie de necesidades de urgencia que se dan según las circunstancias. Si tenemos algún herido en el grupo, por ejemplo, habrá que atenderlo antes de ir a buscar agua o alimento. He aquí una serie de emergencias que podemos incluir en nuestro propio "protocolo" cuando salgamos afuera o si nos vemos envuelto en una situación comprometida:

  • Primeros Auxilios: En esta categoría entra cualquier urgencia o emergencia donde la integridad propia o ajena está comprometida. Pueden ser por fractura de huesos, esguinces, quemaduras, hemorragias, heridas graves, infecciones, ataques al corazón, ataques de ansiedad, envenenamiento, hipotermia o hipertermia, etc.
  • Fuego: Fundamental cuando establecemos un campamento. Una hoguera, ya sea de día o de noche, que nos proporcione calor, iluminación, seguridad y en definitiva bienestar. Cuando hacemos fuego y lo controlamos sentimos el mismo regocijo y confort que cuando lo hizo el primer ser humano.
  • Orientación: Suelo poner este punto en el "Top 3", pero dado este post lo dejo como otro factor importante. Ya sabemos la importancia que tiene el saber donde estamos, haciendo donde queremos dirigirnos, seguir el camino correcto o un rastro, o conocer las rutas de donde sacamos nuestros víveres.
  • Meteorología: Debemos prestar atención a todo lo que nos rodea. La naturaleza se anticipa ante cualquier cambio en el tiempo, es interesante conocer las señales que nos envía la naturaleza para ir un paso por delante y prepararnos. Si tenemos instrumentos como barómetros y termómetros, saber interpretar los datos que nos muestran siempre es de gran utilidad.

Conclusión.

El protocolo A.C.R. no deja de ser un indicativo para actuar de manera rapida y efectiva y no caer en la confusión y el caos. Esta es mi propuesta, evidentemente habrá muchas más igual o parecidas; en cualquier caso, es bueno que cada uno de nosotros tenga claro como actuar en cualquier situación. Esto nos ayudará a ser rápidos y tener los reflejos suficientes para ir por delante de cualquier situación de emergencia.

 

miércoles, 25 de noviembre de 2015

3 o el número mágico de la supervivencia.

Establecer prioridades es una de las bases de la supervivencia.
Si tuviéramos que asignar un número de la suerte a todos aquellos entusiastas de la supervivencia y el bushcraft, ese sin duda sería el 3.

Esto es así porque, en términos muy generales el ser humano puede sobrevivir a:
  • 3 minutos sin oxígeno.
  • 3 horas a temperatura extrema.
  • 3 días sin agua.
  • 3 semanas sin comida.
Evidentemente, existen seres humanos que aguantan más de 3 minutos sin oxígeno, o más de 3 semanas sin comida; eso es algo que va en la condición física de cada uno y en el entorno donde se encuentre. No es lo mismo una persona obesa, que una persona famélica. Como no es lo mismo 3 días sin agua en el desierto, que 3 días sin agua en un bosque templado (difícil no encontrar agua en este último sitio en tres días, todo hay que decirlo).

Lo importante es priorizar.

Estas pautas las tenemos siempre presente, nos ayudan a mantenernos alerta y a analizar la situación en la que estemos en un segundo. También tenemos que tener presente la preparación mental. Al igual que debemos entrenar nuestro cuerpo y nuestras habilidades en el medio natural, también es necesaria una mentalización diaria y cotidiana por si llega el día en que dependamos de nosotros mismos. En este post hablo más detenidamente sobre la "mente del superviviente" o preparación mental.




Es mejor y más económico "llenar tu cabeza" que "llenar tu mochila".
Trazar un buen plan una vez analizada la situación y seguirlo a menos que las cosas no vayan como se esperaban, es la mejor manera de garantizar nuestra seguridad estemos donde estemos. Tener en cuenta el Protocolo A.C.R. en todo momento y no descuidar ninguno de sus puntos.Tener siempre la cabeza fría, pocas cosas hay que nos vuelvan tan vulnerables como un ataque de nervios o que en el grupo se contagie un sentimiento de derrotismo. Como intentamos decir siempre: "Espera lo mejor, y prepárate para lo peor". Y por último, establecer objetivos claros, posibles y concisos (recoger leña, vigilar el perímetro, traer agua del río más cercano) esto hará que estemos siempre ocupados y concentrados, manteniendo la satisfacción del trabajo bien hecho, alejándonos de ese temido 3.

La soledad.

Hay quien añade a esta lista una quinta máxima y es "3 meses a solas", es decir, sin compañía. A partir de ese tiempo se supone que nuestra psique es susceptible de sufrir un colapso por la soledad y el estrés de la situación, provocando ansiedad, depresión, paranoia, delirios e incluso tendencias suicidas. A esto hay que añadir que en tres meses una persona en soledad en un medio natural desconocido es muy probable que sufra algún tipo de accidente que lo incapacite; ya sean heridas o quemaduras infectadas, fracturas, luxaciones, ataques de animales, envenenarse o caer enfermo, son infortunios que pueden llegar a ser letales si no hay nadie que nos pueda ayudar.

Mantenerse ocupados siempre es mejor que quedarse parado en la soledad.

Conclusión.

No está de más tener siempre "el número tres" presente y obligarnos a estar física, mental y técnicamente preparados para lo que pueda ocurrir. Tener siempre un plan A, un plan B y el siempre olvidado plan C, estableciendo nuestras prioridades que nos garanticen el éxito. No es necesario caer en la paranoia y dejar de vivir el día a día. Simplemente hay que aceptar nuestra fragilidad como seres vivos, y a su vez, valorar la potencia que tenemos en el cerebro para sortear los avatares del destino.

viernes, 13 de noviembre de 2015

¿Qué es la supervivencia?

Fotografía del rescate de Jose Luís Inciarte, superviviente del "Milagro de los Andes" en 1972.

Según la R.A.E., la definición de esta palabra sería:

Supervivencia (Del lat. supervīvens, -entis, que sobrevive).

1.f. Acción y efecto de sobrevivir.

Una definición escueta y simple, pero que alberga una acción trascendente como es la de sobrevivir. Sobrevivir es seguir vivo después de la muerte de una o varias personas tras un hecho o un momento especialmente peligroso. Es un estado mental del hombre cuando su vida corre peligro, mantener la esperanza de escapar del medio hostil y volver a casa. Sobrevivir es pensar en lo mejor y prepararte para lo peor.

Bushcraft versus Supervivencia.


La eterna dualidad sobre donde empieza uno y acaba el otro. Es totalmente entendible que ambos conceptos sean primos hermanos en el sentido que comparten muchísimas técnicas y estrategias para desenvolverse en el medio. De hecho, ambas actividades tienen más cosas en común que diferencias. Pero entonces, ¿que aspectos son aquellos que los diferencian? 
  • Situación: La supervivencia es un momento o estado fortuito. El bushcraft es un momento o estado voluntario.
  • Duración: La supervivencia está pensada para un lapso de tiempo breve o poco duradero hasta salir de la situación o ser rescatado. El bushcraft está pensado para un lapso de tiempo largo o indefinido, buscando la adaptación sin esperar ayuda artificial o del exterior.
  • Naturaleza: La supervivencia es un estado de constante emergencia. El bushcraft está lejos de ser un estado de emergencia. Está mas cercano a una actividad placentera, o al menos, sosegada.
  • Materiales: La supervivencia busca el ahorro de elementos para sobrevivir. El bushcraft busca el poder sustituir cualquier elemento por otro de origen natural y no depender de ello.
  • Metodología: La supervivencia enfoca sus estrategias y técnicas en mantener al grupo o al individuo a salvo y con vida. El bushcraft enfoca sus estrategias y técnicas en aprovechar el ecosistema que le rodea para su bienestar y convivir con ello.
  • Finalidad: La supervivencia busca sobrevivir. El bushcraft busca la adaptación y seguir viviendo.
  • Sentimiento: La supervivencia busca volver a casa. El bushcraft intenta que la naturaleza te haga sentir como en casa.
Como veis, estos aspectos que he puesto de ejemplo sirven para haceros una rápida idea de esos matices que diferencias ambos conceptos. Como algunos sabréis, no soy amigo de las etiquetas y considero tanto la supervivencia como el bushcraft dos disciplinas interconectadas donde cuando salimos al campo, ambas comparten gran parte de las estrategias y técnicas que no son para nada incompatibles unas con otras. Para concluir, un claro ejemplo para resumir este apartado sería el siguiente:

Un náufrago atrapado en una isla lejos de la civilización.

Postura de supervivencia: Construir/escribir el acrónimo S.O.S. en la orilla bien grande por si pasa un avión, levantar una gran pira para encenderla si hay algún barco en el horizonte, racionar los víveres y otros bienes con los que se han llegado, construir/hallar una balsa para probar suerte mar adentro...

Postura de bushcraft: Explorar el entorno para encontrar agua, animales, frutos y materiales, construir un refugio y materiales que nos ayuden en la situación, explorar la isla para hallar nuevas oportunidades de asentamiento que sean más seguras y estables, estudiar la meteorología del lugar para anticiparnos...

Como podréis observar hay diferencias de la actitud del náufrago frente a esta adversidad, sin embargo, ambas posturas pueden perfectamente interrelacionarse: El náufrago puede explorar la isla y dejar varias señales de S.O.S. por la zona y una pira que sea visible desde cualquier punto de la isla, mientras, buscaría los recursos necesarios para subsistir racionando los que ya tiene y construirse un buen refugio y vivir lo más cómodo posible en la isla mientras mantiene la esperanza de que alguien puede encontrarle.

Fotograma de la película "Náufrago" (2000).
Habilidades.

Las habilidades del superviviente son más disciplinarias que en el bushcraft, en el sentido que muchas de ellas son necesarias de aprender a través de expertos profesionales mediante talleres, jornadas o cursos. Estas habilidades se complementan a la perfección con las ya citadas en el post sobre bushcraft, cosa que también se puede decir en el caso opuesto.
  • Primeros auxilios: Fundamental para el superviviente y en general para cualquier ciudadano. Saber desinfectar heridas, coser cortes profundos, curar quemaduras, aliviar contusiones, entablillar extremidades fracturadas, aplicar un torniquete, actuar frente a una hipotermia o un estado de deshidratación/inanición, practicar una reanimación cardiopulmonar, etc. Habilidades que pueden salvar vidas en momentos críticos.
  • Cabullería: El arte de saber hacer buenos nudos, imprescindible.
  • Escalada: Tener conocimiento y práctica a la hora de practicar un ascenso en pared vertical, un descenso en rapel, asegurar una subida, etc.
  • Navegación: Tanto en ríos como en alta mar. El superviviente debería saber desenvolverse en barco, kayac o balsa. Saber dirigir un timón y orientarse en la noche.
  • Rastreo: Llegado el momento, el superviviente tendrá que aprender a seguir presas para poder cazar.
  • Trampeo: Otra habilidad nada desdeñable. Una buena trampa, rudimentaria o sofisticada en el sitio correcto asegura la cena.
  • Botánica: Muy importante, sobre todo saber que frutos poder comer, que setas son las venenosas o que plantas y raíces pueden ser medicinales.
El resto de habilidades básicas que puedan añadirse se encuentran en el post sobre bushcraft. Estas digamos son las más representativas para la supervivencia.

Método de arco frotado para hacer fuego.

 Herramientas.

Las herramientas de aquellos que hacen jornadas de simulación de supervivencia no distan mucho de la mochila del bushcrafter, sin embargo, sí que hay un extra importante en el equipaje del superviviente. Para evitar reiterarnos en el inventario para bushcraft, he aquí una serie de elementos que todo superviviente debe llevar en su mochila, además del que pudiéramos añadir del equipo de bushcraft. Como siempre insisto que esto es solo una aportación personal, que a criterio de cada lector puede haber discrepancias, así que os animo a comentar este post para así enrriquecernos entre todos.


  • Ropa: Tan simple como eso. Depende del entorno, el superviviente va preparado con ropa apropiada con una o varias mudas (calcetines y ropa interior). Unas buenas botas de trekking (ya usadas con cordones de repuesto), ropa de abrigo para las zonas frías como chaquetón, gorro, guantes, braga/shemag, camiseta térmica, etc. O ropa de tejidos ligeros para zonas húmedas y/o calurosas, como chaleco, camiseta de manga corta, chambergo/pañuelo/gorra, gafas de sol, bermudas, etc. Y un poncho impermeable para la lluvia.
  • Higiene: Un neceser con todo lo necesario para ir aseado como una pastilla de jabón, cepillo y pasta de dientes, peine, gomas para el pelo, desodorante, repelente de insectos, protección solar, cuchillas de afeitar, etc.
  • Equipo de escalada: Esto no tiene porque entrar en el "pack" pero siempre resulta de utilidad tener un buen juego de arnés, cordino, mosquetones, etc.
  • Linterna: Al superviviente le gusta la luz directa. Una linterna con pilas de repuesto y una de sustitución que funcioné a relé van muy bien.
  • Silbato: Un silbato de emergencia que tenga buenos decibelios cuando se sopla a todo pulmón, importante para enviar señales acústicas.
  • Aguja e hilo: Siempre viene bien tener una pequeña cajita con estos dos elementos.
  • Manta térmica: Para las emergencias, si hay heridos o afectados por hipotermia. También puede usarse en las noches más frías.
  • Saco de dormir: Hay sacos a precios económicos, fáciles de transportar en el macuto que nos harán la pernocta más placentera.
  • Esterilla: El duro suelo de la montaña o la escurridiza arena de la playa no tendrán nada que hacer con una esterilla extendida para poder descansar.
  • Cuaderno y lápiz: No menosprecies su presencia, siempre es bueno tener un soporte para apuntar lo que sea. Rutas, observaciones, apuntes, dibujos, ideas, pensamientos. A veces escribir en un simple cuaderno ayuda a liberar estrés traumático en mitad de una supervivencia.
  • Macuto: Debido al volumen y peso de tanto material (el expuesto aquí y el que podríamos añadir del post sobre bushcraft) necesitamos obligatoriamente un macuto de entre 30 o 40L o más de capacidad. Que sea ergonómico, adaptable, que pueda ajustarse bien a nuestra espalda para no sufrir en el camino.


Bear Grills, icono mediático de la práctica de la supervivencia.


La psicología del superviviente.

Suele ocurrir que los menos preparados son los que al final viven las peores experiencias. Las historias de supervivencia son insólitas crónicas de personas que sin comerlo ni beberlo se vieron atrapados en mitad de una catástrofe, muchos de ellos no tuvieron tiempo ni medios para reaccionar y se vieron aislados, heridos o impedidos; sin posibilidad aparente de que la ayuda llegara a tiempo. El ser humano y su instinto de conservación despiertan repentinamente para agarrarse a la vida como un clavo ardiendo, ayudando a los que a su lado quedan para protegerse mutuamente. Tras el desastre, cuando ya todo ha pasado, la huella de la supervivencia queda indeleble en la memoria de los que sobrevivieron y viven para contarlo.

Y son estas historias las que nos llegan, como el accidente aéreo del vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya o el tsunami de Sumatra. Historias que nos muestran hasta donde llega la psicología del superviviente cuando ya todo parece perdido.

Es por eso, que el resto de las personas que por fortuna no hemos tenido que pasar por calvarios parecidos, desarrollamos a través de la empatía esa "psicología del superviviente" lo que nos anima a prepararnos física, psicológica y técnicamente ante las adversidades.

La mente del superviviente se gesta en la prevención, la humildad, la sensatez y la cautela. Un estado de alerta latente que nos hace mejorar como individuos y dar lo mejor que tenemos a nuestros semejantes, haciéndonos amar la vida más de lo que muchos lo hacen. Porque la prueba más difícil de supervivencia es la vida misma, superar con constancia y paciencia aquellos acontecimientos que nos abren una brecha en nuestras emociones.

Somos humanos, y aquello que no nos mata, nos hace más fuertes.










jueves, 12 de noviembre de 2015

¿Qué es "Bushcraft"?

Típico pinar de la región de Andalucía, España.

Sin duda esta es una de las palabras (si no la que más) que se repite en este blog. Es necesario hacer un apunte conceptual sobre el origen del término y todo lo que aborda en si para comprender con claridad de que estamos hablando.

Definición.

El término bushcraft tiene un origen anglosajón que significa literalmente "Habilidad de arbusto". Aunque la connotación de esta frase, según el diccionario Oxford es: "Habilidad en asuntos relativos a la vida en el monte". Esta definición es más apropiada. La palabra tiene un origen con un par de centurias a sus espaldas donde ya se usaba con el mismo significado actual en las regiones África del Sur y Australia, en aquellas personas que imitaban las habilidades de los indígenas de la zona para adaptarse mejor al medio. Etimológicamente, en esta palabra se halla una raíz en la lengua flamenca que se refería a los asentamientos que se hallaban en las lindes de los bosques y selvas. En los países de habla inglesa y casi en el resto del mundo, a los practicantes del bushcraft  se les denominan "bushcrafters".

Tribu de aborígenes australianos a principios del siglo XX.


Significado.

¿Pero que demonios conlleva en realidad el bushcraft? La respuesta no debe decirse a la ligera ya que, esta actividad suele confundirse con otras actividades hermanadas como pueden ser la supervivencia o el "survavilismo", que comparten muchas de sus técnicas aunque no el fin de cada una. 

De una manera concreta, el bushcraft no es otra cosa que adentrarse de manera voluntaria en el corazón de la naturaleza sin más equipaje que unas pocas herramientas esenciales (a veces, una o ninguna) y desenvolverse en el medio natural de manera fluida y primigenia, aprovechando sus recursos y minimizando el impacto ecológico, tal y como lo hicieran nuestro primeros antepasados. El bushcraft también puede explicarse como la "supervivencia a largo plazo", ya que un superviviente que pase semanas en el medio natural esperando un rescate, consumirá sus víveres (si es que le quedan) y no tendrá más remedio que adaptarse al medio que le rodea aprovechando los recursos naturales.

Otras formas de explicar su práctica son: Autosuficiencia en el terreno natural, supervivencia ancestral, instinto humano de conservación, forma de vida natural elegida, etc.


Refugio fabricado con materias primas usando técnicas propias del bushcraft.

Habilidades.

El bushcraft empieza siendo una curiosidad, sigue creciendo como una afición, continua como una actividad lúdico-deportiva y acaba siendo un estilo de vida, una filosofía del ser, todo un dogma. Como el escalador que sufre en cada agarre pero es adicto a la adrenalina que segrega en esos momentos, el bushcrafter busca esa endorfina que le proporciona el medio natural cuando está solo o en compañía de algún elegido, buscando la forma de protegerse de la la lluvia que se avecina en el monte, de salvaguardar la hoguera frente a los vientos del desierto, de cenar un buen pez de río que tan solo puede proporcionarle sus reflejos y una rudimentaria lanza o un improvisado sedal y anzuelo. Tan solo la incesante práctica de estas técnicas hacen alcanzar la maestría al bushcrafter para salvaguardar su vida en comunión con la salvaje naturaleza.

Un ejemplo de que habilidades empiezan siendo las básicas en el aprendizaje del bushcraft son:
  • Orientarse no solo hallando el norte a través del sol o las estrellas, sino observando el comportamiento de la naturaleza (como donde se condensa la humedad en la montaña para saber su cara norte, o en que lugar los troncos acumulan más musgo).
  • La obtención de agua limpia y potable, ya sea a través de ríos o acuíferos naturales. O por medio de frutos, plantas u otros medios.
  • La preparación de fuego, obteniendo la yesca de manera intuitiva y aplicando las técnicas de encendido, ya sea por chasquido o frote (o con un pedernal) con materiales obtenidos en el medio natural. 
  • La construcción o adaptación de un refugio que nos permita la pernocta y el cobijo necesarios para soportar las inclemencias del medio.
  • La obtención de alimentos reconociendo las plantas, raíces, tubérculos, hongos y frutos comestibles, y también usando habilidades tradicionales para pescar y/o cazar piezas y saber como aprovechar cada parte de estos valiosos animales respetando el ciclo vital.
  • La fabricación de armas, herramientas, utensilios y mecanismos con materiales totalmente naturales para un fin concreto.
Esta lista solo muestra las habilidades básicas que todo aspirante a bushcrafter debe conocer, como nota hay que añadir que estos conocimientos no solo han de asimilarse por la teoría, ya sea escrita o contada; el verdadero espíritu reside en involucrarse y llegar a asimilar estas técnicas casi como cotidianas.

Hacha, cuchillo y sierra plegable. Tres herramientas básicas en la práctica del bushcraft.

Herramientas.

En bushcraft, la utilización de herramientas es primordial, ya que la esencia de esta forma de vida se basa en el "hazlo tú mismo" (en inglés esta expresión se reduce en las siglas DIY "Do It Yourself"). Las herramientas nos ayudan a obtener las materias primas necesarias para desenvolvernos en el medio natural y poder obtener sus recursos. Todo bushcrafter que se precie tiene en su mochila un inventario esencial para garantizar su integración en el medio. No hay un equipo estándar en si mismo que digamos sea el ideal para la práctica del bushcraft, esta forma de vida es tan personal e íntima que cada persona tiene sus propios recursos y sabe que le falta o que le sobra en cada salida. Sin embargo, la gran mayoría de practicantes coinciden en que hay una serie de utensilios que sirven de mucha ayuda.

A continuación, dejo un listado lo más genérico posible de lo que a mi parecer debe tener cualquier bushcrafter:

  • Cuchillo: El padre de todas las herramientas, una garantía de supervivencia si se sabe usar. Desde que el primer homínido tallase la primera lasca de sílex para cortar y clavar, el cuchillo se ha convertido en la herramienta por excelencia. Pocos materiales maleables hay que se resistan al filo de un buen cuchillo en una mano hábil. No puede faltar en tu equipo.
  • Hacha: Junto al cuchillo, es la segunda herramienta imprescindible. Afilada y contundente, nos ayuda a cortar y tallar materiales gruesos y recios como la madera, el hueso e incluso la piedra. Su uso está pensado para la extracción de la materia prima, aunque no es desdeñable agarrar su mango si estamos expuestos a las amenazas que pudieran surgir.
  • Sierra: La sierra es la tercera herramienta que cierra esta "tríada del bushcraft". Normalmente las que se usan son plegables, de cadena o de cable para facilitar su transporte, aunque como todo, depende de cada uno. Su utilidad es simplemente la de serrar troncos para obtener madera y/o leña.
  • Navaja: La hermana menor del cuchillo, más pequeña y de hoja plegable. Lo común es tener la navaja multiusos o navaja suiza. Aparte de la hoja, estas navajas nos proporcionan una serie de herramientas extra para diferentes usos que varían según modelo y fabricante. La hoja de la navaja nos proporciona cortes finos y precisos, ideales para tallar o hacer pequeños trabajos que requieran más precisión que con el cuchillo. Esta herramienta debe estar siempre en nuestro bolsillo del pantalón.
  • Piedra de afilar: Con lo que llevamos ya listado, no hace falta mencionar los motivos que conllevan tener al menos una unidad en nuestra mochila.
  • Cantimplora: Ya sea una clásica cantimplora de camping, un termo, una botella de plástico o una bota riojana. Necesitas beber agua si estás fuera y lejos de obtenerla, así que es obligado llevar un contenedor de al menos 1,5 o 2L de capacidad con agua potable. Salir al campo no deja de ser un ejercicio, y más si estás construyendo un refugio o subiendo una empinada cuesta, intenta llevar el doble de agua que piensas consumir. Con esto no te la juegues, recuerda la ley del 3.
  • Brújula: Hoy día tenemos los smartphones y otros aparatos que nos pueden indicar la ruta a seguir o la posición exacta de cualquier punto del mundo, incluyendo la nuestra. Pero la tecnología digital no deja de ser frágil y volátil en un entorno natural donde la señal puede ser débil o nula y la batería se consume cada minuto que pasa. Así que consigue una buena brújula, que sea precisa y manejable. Invierte tiempo y esfuerzo en saber orientarte, trazar una ruta segura de ida y vuelta, y acompaña la brújula con un mapa de la zona por lo que pudiera pasar. Recuerda que esto también forma parte del estilo de vida bushcraft.
  • Pedernal: El fuego es un gran aliado cuando estamos fuera, nos calienta y nos ilumina y hace acogedor casi cualquier lugar. El pedernal es una herramienta obligatoria en nuestra mochila si pensamos estar mucho tiempo fuera y nos sorprende la noche u otras adversidades. Aprende a hacer fuego con esta herramienta para no quedarte tirado, esto no quiere decir que desdeñes las cerillas y el mechero, que también son obligatorios en nuestra mochila.
  • Cuerda: Ya sea paracord 550, cordino, de cáñamo, sisal, de esparto, etc. Necesitarás varios metros de cuerda. El material va al gusto y necesidades de cada uno, ya que cada salida te pedirá un tipo u otro. En lo personal, siempre llevo cuerda paracord 550 por su versatilidad y un carrete de cáñamo o esparto para la construcción.
  • Kit de Primeros Auxilios: En bushcraft nos cortamos, golpeamos, quemamos, tropezamos, caemos y estamos expuestos a otros peligros. Haz un hueco en llevar un pequeño neceser con material de primeros auxilios, lo agradecerás.
  • Comida: Este punto se suele obviar pero creo que es uno de los más importantes como también los es el agua. Llévate toda la comida que veas necesaria, la comida es algo que aunque ocupe espacio a la ida, a la vuelta ese espacio volverá a estar libre. Aun si en tu jornada de bushcraft tengas pensado ir a recolectar frutos, pescar o buscar alguna presa; llévate víveres nutritivos que te aporten mucha energía y te carguen las pilas. Lo necesitarás.
  • Mochila: ¿Habrá que llevar todo esto en algún sitio, no? Búscate una buena mochila, lo interesante es que sean mochilas adaptadas a tus necesidades y a la actividad que tengas en mente. No lleves una mochila pequeña para varias jornadas, ni un mochilón para una tarde. Sé coherente. Lleva lo justo, la experiencia te dirá que necesitas y que no. Eso sí, procura que la mochila tenga suficiente bolsillos y compartimentos, así podrás organizarte mejor. Recuerda repartir bien el peso y priorizar el espacio para las cosas que más vayas a usar.
Como último apunte a este apartado, recalco que esto es solo una sugerencia personal de lo que siempre debería llevar una persona en su mochila para una productiva jornada de bushcraft. Ni que decir tiene que cada persona tendrá su inventario y le puede parecer mejor o peor esta aportación mía. Incluso existen personas que se van sin nada encima al bosque y a partir de allí fabrican sus herramientas con piedra y madera. Si queréis hacer un comentario al respecto, más abajo podréis hacerlo. Toda aportación es bienvenida :)

Paisaje pirenaico en la región de Aragón, España.


Conclusión.

Para concluir este post quisiera dedicar unas líneas a la reflexión. No soy amigo de las etiquetas, pienso que las cosas son como son y que no necesariamente todo debería tener un nombre o adjetivo. Muchas veces cuando pronuncio "bushcraft" me pregunto cuando llegará el día en que se pueda usar una palabra más cercana al castellano para poder hablar de lo mismo, porque incluso a mi se me atasca a veces. A las personas nos gusta encasillarnos, nos gusta pertenecer a pequeños grupos y colectivos para justificar nuestra personalidad, nuestros gustos o nuestra identidad. Desde que Internet irrumpió en nuestras vidas esto se ha acentuado más y más hasta el punto de llegar a fabricar clichés en lugar de personas.

Con esto quiero decir, que para salir a la naturaleza para respirar aire puro y convivir con el medio aprovechando tu aprendizaje no hace falta auto-etiquetarse como "buscrafter" o Scout o ecologista. Sé tu mismo. Si te gusta irte a la naturaleza y demostrarte a ti mismo que puedes salir de la rueda mecanizada de lo que llamamos progreso tecnológico, esa satisfacción te la llevas tú. No hay nada que demostrarle a nadie. Tampoco existe un método establecido, ni unas normas o leyes que expliquen exactamente que se debe hacer cuando estas solo en el bosque. Lo único que conocemos es la colección de experiencias que otros vivieron y que transmitieron.

Ahora ha llegado tu turno. Cierra el navegador, prepara tu mochila y dirígete a donde más árboles halla. Solo escuchando tu instinto encontrarás tu verdadero camino y la práctica te demostrará hasta donde eres capaz de llegar.

¡Buena suerte!